Porque hacerse una sesión de fotos postboda
Una sesión postboda es la excusa perfecta para que volváis a poneros ese traje y ese vestido que tanto han significado para vosotros una vez más. Además, os da la posibilidad de haceros un reportaje fotográfico tranquilamente, sin la preocupación de que vuestros invitados os estén esperando en el salón y en la que los protagonistas sois únicamente vosotros. Hoy hablamos sobre cómo conseguir una sesión postboda idílica.
El lugar
¿Qué tipo de ambientación os gustaría que tuviese vuestro reportaje postboda? Podéis apostar, por ejemplo, por un estilo más natural, rodeados de vegetación o por uno más urbanita, por las calles de la ciudad. Decidid qué os representa más y pensad cuál sería vuestro escenario ideal. Nadie os conoce mejor que vosotros mismos: ¿no concebís vuestra vida sin playa?, ¿hay un pueblo que tiene mucho significado en vuestra historia de amor? Entonces, quizás ahí tenéis la respuesta.
El look
Lo más habitual en las sesiones postboda es que los novios luzcan los mismos trajes que llevaron durante su día B. Sin embargo, no hay ninguna norma que dicte que tengáis que ir exactamente igual. La novia puede optar por llevar un peinado un poco más relajado o llevar otro tipo de accesorios… ¡lo que os haga sentir más cómodos! Además, podéis incorporar algún toque inesperado para vuestra sesión: unas botas de agua debajo del vestido de novia o incluso que ambos llevéis el mismo calzado: unas zapatillas blancas, unas converse rojas, etc. ¡Eso sí que es originalidad!
Porque hacerse una sesión de fotos postboda
En Retamosa fotografía Bodas queremos inmortalizar cada detalle de vuestro amor y haceros un reportaje postboda que queráis enseñarle a todos vuestros amigos y familiares una y otra vez. Para cualquier consulta, podéis poneros en contacto con nosotros.
